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Viajes

Libros, caminos y días traen al hombre sabiduría

La Fortaleza de San Fernando de Omoa

Mientras recorríamos aquella gran fortaleza con más de dos siglos de antigüedad dimos con un pequeño salón que antaño se habia usado como capilla para los  soldados que resguardaban el fuerte. Su techo arqueado hacia parecer nuestras voces más profundas y fuertes por el eco que producía. Decidimos cantar un himno. Y cantamos el primero que se nos vino a la mente. ''Castillo fuerte es nuestro Dios. Defensa y buen escudo. Con su poder nos guiará...'' Aquellas palabras del Reformador Martín Lutero cobraron un nuevo significado desde entonces. Por un momento viajamos al pasado y acompañamos a Lutero en aquel ''trance agudo'' y cantamos juntos ''De Dios el Reino queda''.

El Ulúa

Allí estábamos... bajo la lluvia, en medio de la oscuridad. Sin luz eléctrica. Sin zapatos. Mojados, con frio y hambre. 

Siendo atacados por un enjambre de zancudos sedientos de sangre y a la ribera de uno de los  ríos más grandes y peligroso de Honduras, El Ulúa. Nuestra misión: llevar el evangelio del Señor Jesucristo a los habitantes del Remolino, una pequeña aldea a 30 minutos de El Tigre donde nos encontrábamos. Aquella fue mi primera experiencia de lo que significaba servir a Cristo llevando el evangelio, sin importar el costo. Ahora que lo pienso... valió la pena. 

El Cajón

El Cajón, la represa hidroeléctrica más importante de Honduras. Me hace pensar en la capacidad que tenemos los seres humanos para hacer cosas grandes. Pero también lo pequeño que somos ante esas cosas. Ahora me imagino lo terrible que será para todos, estar delante del Dios Vivo. Cuyo trono es descrito en Apocalipsis 20:11 como:

Un Mega Trono. Es aterrador siquiera imaginar ese momento... delante del trono de Dios.

Es mejor estar preparado con Cristo. 

Montañita

Aquella mañana que llegamos a Montañita, Santa Bárbara, no sabíamos todo lo que teníamos de pasar por predicar el evangelio a las personas de esa pequeña aldea de no más de 60 casas (la mayoría de tierra y barro). Allí aprendí lo que significa vivir por fe, sostenidos por la mano invisible de mi Dios... 

Es en medio de la estreches donde nuestra fe se ensancha. 

Neblinas

A más de 1200  metros sobre el nivel del mar, se encuentra la montaña conocida como Neblinas. Este monte hace honor a su nombre, ya que es una de las montañas más nubladas de la Cordillera del Merendon. Aún en las horas del mediodía, la cima está rodeada de densas nubes. Mientras predicaba el evangelio a los habitantes de esta pequeña aldea, pensaba en la Presencia de Dios. La llamada shekinah que era la nube que seguía al pueblo por el desierto dándoles luz y sombra. También la presencia de Dios permanece inalterable en las vidas de los que confían en él. 

Buenos Aires

En un momento del camino nos detuvimos a descansar y comer algo antes de seguir. Ibamos rubo a Buenos Aires del Filon otra de las montañas del Merendon. Era la segunda vez que subia una montaña en mi vida. Aquella vez aprendi la importancia de caminar acompañado. La camaderia es algo importanticimo cuando se viaja. Las distancias se hacen más cortas cuando caminas acompañado y más gloriosas cuando caminas con Dios.

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